.IM GEGENLICHT.
Hace días que Iara no para de pensar.
Cada canción es un recuerdo del pasado, algo que la hace transportarse a otra época.
Cada palabra la pone en su boca y cada sonrisa en sus labios.
Cada mirada es de ese intenso color chocolate.
Ella se pregunta, mientras cierra sus ojos y deja escapar un par de lágrimas traicioneras, por qué a estas alturas le vienen a la cabeza esos sentimientos encontrados.
¿Por qué ahora?
¿Por qué el corazón le late más fuerte al recordarle? ¿Por qué la mirada se le nubla y la invade la nostalgia?
Ella era la chica buena, la chica tímida.
No hablaba mucho, porque no tenía nada que decir.
Le gustaba leer y escuchar música.
A veces cantaba, pero solo a su lado.
Sólo con su voz acompañándola, sólo con él escuchando.
Le enfada ver cómo cambia cada situación, cada persona.
Como cambió él.
Y es que… ¿Qué queda de lo que algún día fuimos?
Sólo un recuerdo, una foto, una frase.
Un momento.
Sólo permanece el esbozo de algo que ya no es, ni será.
Ahora él es el chico malo, porque ni siquiera la echará de menos.
Ahora la desprecia, ahora ya ni siquiera piensa en ella.
Simplemente una mirada de odio, o incluso de indiferencia.
Sus conversaciones risueñas son ahora una guerra de palabras, o de silencios.
¿Qué fue de todo aquello? ¿Se les olvidó?
No.
Simplemente lo dejaron pasar.
Dejaron pasar ese “Quiero dibujar tu nombre en cielo”.
Dejaron de lado sus manos unidas.
Se olvidaron de aquel beso a contraluz.
Se olvidaron de protegerse el uno al otro.
Él se olvidó de ella. Y ella de él.
Ahora son diferentes.
El tiempo ha pasado por los dos, y aunque ni siquiera respiren el mismo aire, aunque ni siquiera se vean ni se interesen el uno por el otro, ambos saben que, de vez en cuando les viene a la cabeza un mero instante, de aquel tiempo en el que solo existían ellos dos.
Cada uno es feliz por su lado, o, al menos, lo intenta.
No hay ninguna razón por la que volver al pasado, por la que permanecer.
Hace días que Iara no para de pensar.
Cada canción es un recuerdo del pasado, algo que la hace transportarse a otra época.
Cada palabra la pone en su boca y cada sonrisa en sus labios.
Cada mirada es de ese intenso color chocolate.
El por qué a su pregunta es demasiado fácil.
El primer amor nunca se olvida, y tampoco el primer corazón roto.
***
Nuevo Mini *O* xD
Y cuando digo mini es que es muy mini xD